17 de octubre de 2009

Por suerte para todos :-P, hace mucho tiempo que me desenganché de mi adicción a Savater.

Mi respeto, admiración y cariño por él no han disminuido un ápice, pero, aunque sigo acumulando sus libros (tengo ya más de 30...), no los leo (como, por otra parte, no leo los de nadie más).

Sin embargo, revisando algunas de las cosas que he ido escribiendo aquí a lo largo de estos cuatro años (¡!), creo que hay dos ideas que aprendí de él que impregnan el blog:

Hemos de ser fieles a lo que nos produce placer.

Admiramos con lo que hay de admirable en nosotros.

No hay comentarios: