14 de marzo de 2009

Daniel el Rojo

Desayuno en el hotel, y en la mesa de al lado se sienta un hombre cuyo rostro me resulta familiar. Abre su MacBook, saca dos teléfonos mòviles. Enseguida caigo.

1 comentario:

Alba dijo...

Ala! Yo también coincidí una vez con Daniel Cohn-Bendit en unas conferencias!
Coincidimos varias veces: en los pasillos, en la puerta de los servicios...y después nos encontramos al cabo de varias horas en el mismo vagón de tren. Nos sonreímos y saludamos, me sonaba un montón pero caí demasiado tarde en quien era...y siempre me ha quedado la espina clavada de no haber aprovechado la ocasión. Es un personaje que me ha fascinado siempre.
;)