24 de septiembre de 2008

Los argumentos con que justificamos nuestra conducta suelen ser más estúpidos que nuestra conducta misma.

Es más llevadero ver vivir a los hombres que oírlos opinar.

Nicolás Gómez Dávila

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que buena!!!!
Totalmente cierto.
SALuD!
D